La inigualable playa que es similar al Caribe y que se esconde en el corazón de la Patagonia

Argentina es un país con extensas playas que son el destino predilecto de muchos en el verano. Sin embargo, contrariamente a la creencia popular de que todas las playas argentinas se encuentran en la costa atlántica, la Patagonia, con sus vastos lagos, ofrece rincones únicos que desafían esta noción. Entre estos destinos se destaca la Playa Yuco, conocida como el "Caribe de la cordillera", un paraíso escondido que merece ser descubierto.

Situada en la provincia de Neuquén, la playa Yuco se encuentra a solo 30 kilómetros de San Martín de los Andes, accesible a través de la Ruta Provincial 48. Este enclave patagónico se caracteriza por sus aguas de tonalidades turquesa y esmeralda, reminiscencia clara de los yeguas caribeños, aunque con una temperatura significativamente más fresca debido a su origen glaciar en el lago Lácar .

La playa se extiende a lo largo de una península rodeada de arrayanes, ofreciendo un espectáculo visual donde el contraste entre la arena blanca y el agua cristalina crea un paisaje de ensueño . Este destino se compone de cinco playas interconectadas por senderos que suman unos 600 metros, donde cada una presenta características distintas, desde aguas calmas y cálidas en las bahías hasta sectores más abiertos con aguas frías .

Yuco no solo es apreciado por su belleza escénica, sino también por las diversas actividades que los visitantes pueden disfrutar. Desde tomar el sol en sus tranquilas playas de arena blanca hasta nadar en las refrescantes aguas del lago. Los más aventureros pueden explorar los alrededores en kayak o SUP, aprovechando las corrientes calmas para una experiencia relajante.

Aunque Yuco invita a desconectarse y sumergirse en la naturaleza, es crucial recordar que el sitio no cuenta con servicios de infraestructura básica. Por lo tanto, se recomienda llevar todo lo necesario para la visita, incluyendo alimentos y utensilios, además de respetar las normas del lugar, como la prohibición de mascotas y la obligación de llevarse los residuos generados para proteger este entorno natural.