Metía droga a la cárcel a través de un dron: lo detuvieron y se escapó de la comisaría

El hombre de 36 años que había sido detenido en Cruz del Eje como sospechoso de haber ingresado drogas en una cárcel de esa ciudad cordobesa mediante la utilización de un dron, se fugó en las últimas horas de la comisaría en la que se hallaba alojado, informaron hoy fuentes judiciales.

El fiscal a cargo de la investigación de la causa, Raymundo Barrera, manifestó hoy a Canal 12 de Córdoba que el sospechoso, identificado como Javier Frede (36), logró escapar de la seccional local luego de romper un alambrado de un techo.

"Aprovechó la hora de esparcimiento, con la celda abierta, el descuido de la vigilancia y se dio a la fuga rompiendo un tejido que oficiaba de techo”, dijo el fiscal, quien detalló que la fuga ocurrió cuando aparentemente los dos efectivos de custodias “no se encontraban en el lugar”.

Como consecuencia del escape, el fiscal imputó preventivamente a los dos policías por el delito de “facilitación de fuga culposa”, y adelantó que el ahora prófugo Frede, además de afrontar la acusación por “entrega de estupefacientes” al interior del penal, se le suma el delito de “evasión dolosa”.

Frede, y otro hombre de 27 años, habían sido detenidos a principios de esta semana por introducir estupefacientes a la cárcel de Cruz del Eje y luego comercializarlos en la comunidad de este penal ubicado en el el noreste provincial.

Frede, supuesto responsable de utilizar el dron para ingresar la droga a la cárcel, fue detenido luego de que emprendiera la fuga al observar la presencia policial que se aprestaba a allanar su vivienda.

La subjefa de la FPA, Clarisa Carrera, había manifestado que la investigación llevó tres meses de trabajo y se pudo constatar el “ingreso de sustancias por medios tecnológicos, un dron, al servicio penitenciario de Cruz del Eje”, y que para sostener la acusación se cuenta con pruebas testimoniales que se aportaron de manera anónima, las escuchas telefónicas y otros elementos secuestrados en los operativos.

También detalló que el modus operandi consistía en transportar los estupefacientes con el dron, el cual sobrevolaba el patio interno del penal y, en lugar previamente acordado por los detenidos y los internos, se tiraba desde el aire los envoltorios con las drogas, que luego retiraban los presos y los comercializaba en esa comunidad.